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Mostrando entradas de 2017

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Melchor y el camello quebrado (Cuento de Navidad)

Miguel desenvolvió la última figurilla y la colocó con mucho cuidado en el Belen, en eso que Pablo su nieto tiro de su chaqueta para llamar su atención. - ¡Abuelo!  ¡Abuelo! cuéntame otra vez lo que le paso al camello de Melchor. El abuelo cogió del Belen al rey Melchor montado en su camello y se acomodó en el sillón orejero y mirando a su nieto, dulcemente inició el relato.   Érase en un país muy lejano que tres Reyes Magos montados en sus camellos se dirigían, guiados por una estrella...   En ese instante retorno a su niñez, tendría unos siete u ocho años, era e l primer domingo de diciembre, el día que por tradición decorában la casa con los motivos Navideños y ponian el Belen, su padre descubrió que la figura del rey Melchor partida en dos, el camello había perdido sus patas para su disgusto, con el cariño que les tenía a todas las figuras, herencia de su familia. Un gran desconsuelo me asalto al ver rota la figura de mi rey preferido, llegaría con los regalo

“Ad galli cantus” El Canto del gallo (Cuento de Navidad )

Como cada Nochebuena las calles se vacían y el silencio es solo roto por los atronadores petardos, para la diversión de chiquillos y el disgusto de los animales domesticos. Linda, la perrita de Teresa tiembla bajo la mesa camilla donde Natividad, la madre de Ernesto se encuentra ensimismada mirando el plato de sopa ya casi fría. - ¿Mama no quieres más sopa? - Te estamos esperando, es casi la hora de marcharnos a la parroquia para la Misa del gallo. El rostro de la octogenaria se ilumina al oír esas palabras y una mueca dibuja una serena sonrisa, dando a entender alzando las manos que no quiere más sopa. Salen del portal entonando un popular villancico, entrelazan todos sus brazos, ocupando toda la calle en dirección a la parroquia.  Ernesto acerca su hombro al de su madre en muestra de cariño, porque sabe la importancia de esta festividad para ella. Son los momentos de mayor lucidez de Natividad y una alegría para toda la familia, una tregua que por unas horas el &q

Ése amor

Donde los cuerpos se difuminan donde las palabras                                <<ya sobran>> donde la inmensidad se funde y la oscuridad ilumina, donde los días revientan                             <<la eternidad>> y el no-tiempo reposa. Donde las almas florecen      donde no hay verdades ni mentiras, donde no hay como ni cuando donde no hay amor                             <<con juramento>>         Así es ese amor .

Espíritu encarnado

Son tuyos mis ojos aliento y sed, son tuyos mi piel sudor y sangre, son míos tu mirada voluntad y deseo, son míos tu carne empeño y estirpe. No hay mayor veneno que el olvido, ni hay mayor poder que la voz, la verdad camina sola tejiendo la libertad, no hay una auténtica libertad sin la flama del Amor. Amor espíritu encarnado hoguera del renacimiento a las vidas sacralizadas en tierras... que no son yermas.  

Nubes Blancas

Nubes blancas de juventud, siervo de pecados en portales oscuros de paseos hacia lugares de inmortalidad de la mano de amores y desamores. El aire que respiro, mata las auroras, mata y remata los recuerdos, que nunca fuerón. Sabemos que no volverán las risas sin ti, sabremos que el final, lo deje, no sé dónde, se fue, como vendaval otoñal. Nubes blancas que no volverán...  

La búsqueda

Como llegar a ti, que mis pasos sean sombras, por mis pensamientos no den nada, y veinte mil noches sin dormir, por poder llegar a ti. Que cada gesto se vuelva suplica y cada latido la oración, que mi boca se quede seca y la saliva... el elixir, todo por poder llegar a ti. Que duro y frio sea el invierno, en las calles de Madrid como un mendigo tirado, en la boca un cigarrillo y en el suelo el tetrabrik, borracho de tanto buscarte, afónico de tanto llamarte. ¡Dime, Dime! Donde encontrarte antes que la guadaña de la muerte quiera saber de mí. No quiero andar descalzo no te ocultes mentecata, zapatillas de andar por casa, no te burles más de mí, andan tiradas por casa corriendo detrás de ti.  

Hay días...

Hay días como hoy las soledades te encuentran y el silencio te busca y la palabra se calla. Hay días como hoy que andas cansado y mohíno cual sonámbulo sin brújula ni destino. Hay días como hoy el sol ni calienta ni brilla y el ruiseñor no canta su mejor canción. Hay días como hoy Sé, que hay días como hoy encerrado en mi crisálida, sabiendo que pasará los días como hoy.  

Entrelazados II

  ¡Todo belleza! Todo ofrecimiento y la ofrenda.      Karma y piedra, cual otoños perdidos todos conviven.     ...y te vi llegar grito del ahogado, el relámpago.      Vivimos juntos entrelazamos mundos ... te imagino.   ¿Donde esta Dios? La mirada ausente del moribundo.    

Entrelazados

   Tierra de hombres las fronteras las tiñe viento y agua.     Viento humedo  de pasado otoñal  los recuerdos son...     Dos alfileres sujetan las mentiras de los cobardes.      No sé de amor, mis dedos enredados en sus cabellos.      

Lobotomía

Los buitres alzan el vuelo  ... sobre la ciudadela en noche de luna nueva  al olor de una amorfía aberración, cadáveres descompuestos  por diabólicas sonrisas, danzan al unisono  con los pies descalzos y las cuencas vacías, maldecidos por las artes oscuras, blasfemando su libertad. Se arrancan la piel  como acto de albedrío y sacrificio, los hilos son de acero,  sostienen sus cabezas  asfixiando su corazón, ... de día duermen  creyéndose ser la noche  y la luna nueva el sol. Son creyentes de un nuevo día y de un nuevo sol, embalsamaron sus almas y lobotomizo su ser. Gente sencilla y corriente cautivas de Lucifer .

Salmuera

Voz poetica las que brotaban de mí, ... fueron lagrimas . Son sables dulces recubiertos de ardor, matan el amor . Hordas de gente y el otoño hierve España clama . Dulces lagrimas las gotas del alma mía desvelan todo . dueños de la paz y reparten cuchillos  entre los pueblos. Temen al hombre hombre y espíritu, ... rostro de niño .

A todos los lectores

Ante todo quisiera dar las gracias a todos los lectores del Blog.                           "El vagabundo de los sueños". El vagabundo ha viajado por los más dispares países del mundo empezando por España, Estados Unidos, Francia,  Irlanda, Argentina, México, Rusia, Colombia, Alemania,  Ucrania, Brasil, Portugal, Canadá, Chile,Venezuela y un sin fin  de otros países. Muchas gracias amigas y amigos por perder un poco de  vuestro precioso tiempo en la lectura de los poemas como de los relatos de "Un vagabundo ". Un fuerte abrazo a todos.  

San Antonio de la Florida

Suena la musica a lo lejos al abrigo de la noche entrecruzando miradas jugando a ser mayores y el santo de los noviazgos a los zagales bendice. Se juntan cuerpo con cuerpo rozándose casi el alma tan solo van apretándose ... muy fuertemente los dos. Juntos el tiempo le lleva por caminos y senderos, nunca pisados por ellos pero siempre les veras jugar al juego que les unió. Las canas los dos ya tienen el tiempo no se detiene no saben si fue amor o la vida sacralizó.

No preguntes

No te sientas aflijida por un amor perdido, no preguntes... Sí te amó y cuantos de los latidos del corazón fueron convertidos en palabras, en palabras de melancólica canción.   Salta de nuevo al vació, desabrochando los botones uno a uno... de ilusiones y esperanzas, de nuevas esperanzas.   No preguntes, no me preguntes... Quién té volverá amar. No te sientas aflijida vuelve abrir los portales al viento... ¡Al viento! ¡Al Amor!  

Sala 23

Bip-bip, bip-bip, bip-bip. Emilien Fatin Bourbao. Jefe Cirujano en la unidad de trasplantes. Hospital Saint-Louis (Paris). Maldita sea, no llevó ni tres horas fuera del hospital, que desgraciado a muerto ahora. Bip-bip, bip-bip, bip-bip. - Hola Adèle, soy Emilien dime que es tan urgente. - Doctor Fatin tenemos una posible donante de corazón para la señora Blanc, ya se está preparando la sala 23, todo el personal llegará en una hora. ¿Avisamos al doctor Coté también? -Si. -Bien Adèle, voy para el hospital. El doctor Fatin entró en la sala donde permanecen refrigerados los cadaveres, como siempre tenía costumbre y ver el estado de los mismos. Tiró con fuerza del cajón refrigerador y levantó la sabana que cubría el cadaver. No podía ser posible, lo que sus ojos estaban contemplando, las piernas no le repondieron y cayó de rodillas. Agarradose la cabeza con sus manos, un grito desgarrador resonó más allá de la sala. -¡Colette, Colette, Colette¡ Colette era la mujer de su vida, la mujer q

Malos tiempos para el amor

Madre no me levantes, no me levantes, no quiero ver España entre sabanas de espanto. Madre no me despiertes, no me despiertes, no quiero andar por calles entre proclamas y banderas. Madre no quiero ver, no quiero ver, gentes gritándose con ojos coléricos. Madre déjame, no me levantes, no me despiertes, no quiero ver España.

Cinco y sentidos

Ven recuéstate, crucemos las miradas sin decir nad a.     Senos de nacar esculpidos sin cincel, sellan mí tiempo.     Bella sinfonía nota a nota tocas, cinco sentidos. -------   Senos de cera y recorren tus sombras pinceles blancos. ------- Hazme el amor cuerpos sudorosos, rojo y fuego. ------- Te esperaré un aullido de gozo, sabanas blancas. ------- Cabello negro y cuerpo de doncella, en viento cíñe.      Forma perfecta dilatan las pupilas, curva virginal.   Sueño plácido, vendaval de pasión, solo te miró. ------- Esperándote y mi cuerpo reclama otras caricias. ------- Sueño contigo pared contra pared, eres mi único vicio.

Tres más uno

Manchas en papel los sueños son lúcidos, ¡Derramé por fin!   Camino claro entre árboles frondosos, todos observan.      Delante de mí,  sigues como una sombra, eternamente.    

Con fuerza

Dame otra vez tú mano, entrelacemos nuestros dedos y aprieta con fuerza hasta enrojecerlos.  Manos que nos dan la bienvenida o el adiós de despedida.   Manos al cielo rogando que llueva otras pidiendo clemencia. Manos de laboriosos artesanos, manos encallecidas de viejos marineros. Juntemos las manos entrelacemos nuestros dedos y aticemos los latidos al corazón. Manos que se entregan manos que marcan la piel, manos que paran y otras disparan. Manos de nuestras madres entre tirones de orejas y abrazos, mano grandes, manos largas manos de recien nacido son las manos... Dame otra vez tú mano, entrelacemos nuestros dedos y aprieta con fuerza hasta enrojecerlos.  

Al pie del camino

                                                                                  Ay! Pequeño guijarro,                                piedrecilla en senderos olvidados,                       sueñas con ser adoquin en calzada Romana,                           capitel o columna en la plaza de San Pedro                               y la mano del David de Miguel Angel.                                         Ay! Pequeño guijarro,                           sueña en tu descanso de canto pelado.                    En la cima del Everest y el en muro de Adriano,                             ser un rostro en el Monte Rushmore                                    y la estela del cometa Halley.                                        Ay! Pequeño guijarro                           deja de soñar eres piedra de camino,                                              ¡Eres piedra!                                 que en suelas te sueles clavar            

IMAGINARÉ

¡Imaginaré como canta el sol! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré un planeta y lo llamaré Tierra! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré los senderos de amor! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré a ti mujer! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré tú sonrisa! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré nuestro amor! ¡Imaginaré! ¡Imaginaré mares de pasión! ¡Imaginaré! ¡Im

Más viento

Y gritaba con la cabeza erguida. ¡Más y más viento! Entre afiladas espadas, equilibrios, con los calzetines zurcidos, maldiciendo a todo dios, mis desgracias... mientras gritaba. "Más viento o reviento! Más por dentro... voy soltando las amarras de islas desoladas por miles de guerras civiles. Herido en unas o muerto en otras, mientras gritaba. "Más viento o reviento" Salpicando las olas mi torso desnudo salto a lomos de las tormentas. ¡Viento! soy viento.  

Paraíso perdido

Ven y súbete a las más altas ramas Oh!  Brisa fresca Donde se fueron las letras que escribí? ¿Llegaron a tí? ¿No? ¡Ya lo sé! Volvieron donde las cogí. Rayo verde al atardecer. Así ocurrió.   Ven recuéstate crucemos las miradas sin decir nada.  

Cabezadas

Cuantas noches me muero, cuantas veces quiero dormir, cuando duermo, yo me muero, ¡Aprendemos el morir! Duermo con un ojo abierto y las manos entrelazadas, la boca bien apretada y un libro que ponga fin. Parece que me entra sueño, es la hora de dormir, lo dejó todo en su sitio, por si tengo que morir. Que descansen ustedes, ¡Yo me voy a dormir! ¡Que bonito es dormir! Te entra sueño en el sueño. Sueños por los que vivir. Anatta

Rastrojos

Surcos maduros remarcan el tiempo caminos yermos .                                             Todo o nada                                        el juego de la vida                                       ¡Vamos juguemos !                                       Ola temblorosa                                      y al viento clama                                     danzar contra ella. Sol madrugador la luna oscureces ¡Bendecido eres!   Oigo el canto y los coros del bosque en la mañana.  

Cuéntame

Nunca guardo ni ahorro, hablo en alto mis silencios, bebo de ríos y arroyos y en charcos sucios los baños. Camino de espalda y a veces a saltos, de cabeza en cabeza sobre sacerdotes y santos. Los zapatos los malgasto por andar cabeza abajo, mirando el firmamento arriba y el infierno hacia abajo. No esperó que lo comprendan ni que hagan penitencia, las palabras se las lleva el viento, como el cuento de María Sarmiento.